¡Que ruina! (Pisco)

28 y 29.05.2009:

Pisco ¡que desastre!.He venido hasta un pueblo costero llamado Pisco para ir a ver las islas Ballestas y la Reserva Nacional de Paracas. Las guías de viaje definían a Pisco como un poblachon feo cuyo único atractivo e interés era la cercanía con las islas y la R.N.. Pero esto era antes del catastrófico terremoto del 2007. Fue un seísmo de escala 8,9 grados que dejo el pueblo y la comarca de Chincha absolutamente arrasados. Ahora no sabría que calificativo darle, porque se parece a aquellas imágenes que recuerdo del Beirut de sus peores años de guerra: edificios a medio derruir, otros gravemente dañados con grietas por doquier, otros abandonados, la mayoría de las calles son una sucesión de casita baja o barracón, solar, casita bajo o barracón, solar.... y así sucesivamente (en cada solar amontonados los escombros de lo que, un día, fueron los hogares de alguien o el negocio que los mantenía). Las carreteras son una sucesión de grietas, baches, socavones, etc..


Los barrios de barracones "provisionales" que, casi tres años después, siguen igual de "provisionales". El hospital de campaña montado bajo toldos (el que había se derrumbó) sigue bajo los mismos toldos atendiendo a la población en una especie de contenedores a modo de consultas, etc.. y así un suma y sigue sin fin.



El conductor del motocarro que hace de "taxi" y que me llevó hasta el pueblo (el autobús no entra al pueblo y te deja unos 3 kilómetros fuera) me ha contado que hubo cantidad de muertos porque al ser las casas de adobe, el temblor no dejo una en pie. El mayor numero de victimas se produjo en la iglesia (estaban oficiando misa cuando el terremoto). Cuando empezó el temblor la gente que estaba en la plaza frente a la iglesia corría a refugiarse en ella pensando que resistiría, pero se derrumbo toda excepto la cúpula principal del altar mayor.



Me contó también que desde España se enviaron gran cantidad de donaciones y ayudas materiales que nunca llegaron o solo unas pocas.



El gobierno peruano indemnizo a los propietarios de viviendas derruidas con 6000 soles (unos 1500 euros) pero solo para aquellas que tuvieran "papeles en regla", o sea menos de la mitad, con lo que nadie ha podido reconstruir su casa con ese importe -el que lo haya recibido-.



Aquí los mercadillos callejeros no son como en el resto del Perú de artículos de consumo "superfluo" (moda, ropa, calzado, electrodomésticos, etc..), sino de dos clases: de alimentación y de ¡materiales de construcción de desecho!. Los materiales que pudieron aprovechar de los desescombros: tuberías, canalones, tejas, sanitarios, interruptores y enchufes de luz, griferías, etc., etc., etc., se venden para que la gente lo vuelvan a utilizar en la reconstrucción de sus casas o en la construcción de las nuevas que, los que tienen trabajo o recursos, están, poco a poco, construyendo.



Todo muy muy deprimente. Menos mal que la vida siempre se impone y, a la hora de la salida de los colegios, los chiquillos, ajenos a su entorno, se ponen a jugar a cosas a las que yo también jugaba: guá (canicas), peonza, chapas, etc. ¡¡aleluya ... hay vida fuera de la "play-station" para algunos chavales!!.



Al día siguiente a la llegada me embarco tempranito para ver las islas Ballestas. Lo primero que se visita es un petroglifo al que llaman "el Candelabro" de 175 metros de largo y 54 de ancho y sobre el que también hay multitud de teorías sobre "quien" y "para que". No se sabe su origen y las primeras crónicas que lo mencionan son de hace dos siglos. Las teorías: Místicas (representa un cactus del que se extrae un alucinógeno llamado San Francisco que tomaban los chamanes durante sus éxtasis y trances místicos). Patrióticas (señal masónica dejada por el Gral. San Martín en su epopeya libertadora -al parecer tanto San Martín como otros "libertadores" eran francmasones- para señalar un punto de reunión de la flora rebelde para atacar a las tropas realistas). Bucaneras (punto de reunión de los piratas para abordar a los galeones españoles cargados de oro y plata camino de "casa"). Yo después de haber visto las "pelis" de Piratas del Caribe me apunto a esta ultima versión.



Las islas Ballestas son increíbles. La riqueza en plancton de estas aguas del Océano Pacífico -las mas fértiles costas del planeta- hacen que alberguen una cantidad de vida animal esplendorosa. La corriente de Humbolt, fría, al juntarse con la del Niño, caliente, da lugar a una biodiversidad marina asombrosa: desde el plancton a la ballena austral y cuya base son los enormes bancos de anchovetas (sardinillas) que alimentan toda la cadena trófica de estas aguas. Las sardinillas comen el plancton y ... el resto de los animales a las sardinillas: docenas de clases de aves marinas, pingüinos, focas, nutrias de mar, delfines, lobos de mar, etc., etc..



Hay una sobrepoblación de aves marinas que son y han sido la gran riqueza de estas costas durante un par de siglos, pues son los productores -en cantidades industriales- del "guano" (excremento de ave en finolis) que es un abono altamente apreciado desde siglos -ya lo utilizaban los incas- por los agricultores de todo el mundo.



Ya casi no se explota al ser las islas una Reserva Natural Protegida y por la dura competencia de los abonos y fertilizantes industriales en manos de multinacionales. En el siglo XVIII el guano fósil sedimentario de las islas Ballestas tenia una profundidad de ¡entre 50 y 70 metros! (¡que ya es cagar!. ¡Ni que fueran vacas en vez de aves!).



Las colonias de lobos y leones marinos son muy numerosas y ruidosas pues en cuanto nos acercamos a la orilla con la lancha, montan una coral de bramidos atronador, mientras se lanzan al agua, no se si a recibirnos o mas bien a impedirnos avanzar hasta la playa en donde tienen sus harenes y están las hembras criando, porque se ponen delante de la lancha como formando una barrera.



Pero para colonias numerosas, las de las diferentes clases de aves "cagonas" (productoras de guano): cormoranes, piqueros, albatros, pelícanos, etc. (hasta mas de 30 especies distintas de aves habitan y cagan aquí) formando una escandalera de campeonato y echando un "tufo" a guano que tumba. Hay que llevar la cabeza cubierta cuando se pasa por debajo de los acantilados en donde se posan, porque te bombardean a "guanazos" (el guía dice que la posibilidad de que te "impacten" es de un 10%). Yo he tenido suerte en el sorteo y no he pillado nada, pero una señora del bote ha recibido tres "impactos" ¡¡eso es suerte!!.



Después de la excursión en barco se hace otra por tierra a pie para ver la península de Paracas visitando la R.N. y el litoral. El relieve de la costa ha cambiado cantidad desde el terremoto del 2007. Te enseñan unas fotos del "antes" y del "después" (como en la publicidad de los regímenes de adelgazamiento) y la verdad es que el terremoto se llevó una gran cantidad de litoral -que se precipito al mar- y algunas de las atracciones clásicas de formaciones rocosas como la Catedral, ahora se han quedado en "iglesia de pueblo", la Torre ha desaparecido, etc., etc..



La R.N. Paracas esta enclavada en medio del desierto mas árido del Perú. Es un desierto clásico con sus enormes dunas de arena fina y grades extensiones de terreno sin la menor señal de vida animal o vegetal. ¡Una magnifica excursión!.



Por la tarde camino de Lima el autobús me devuelve a la otra realidad: otra sucesión de casas en ruinas, montañas de escombro en las orillas de la carretera, campamentos de barracones, etc., etc., etc..

¡¡Un desastre!! Una de cal y otra de arena.

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