01.09.2008:
No le he visto la cresta al volcán en todo el tiempo, ni ayer ni hoy, por las nubes. El día esta tristón, tristón y no deja de llover por la mañana y por la tarde en plan borrasca, no tormenta.
De buena mañana he ido al parque a recorrer sus senderos para aprovechar el día, pues solo hay un autobús de vuelta a las 2:30 desde Tilarán.
El bosque de las laderas del volcán, aunque no es primario (por la deforestación que causó la ultima erupción gorda del volcán en 1968) esta bastante bien y tiene una buena muestra de fauna. A pesar de no ser tan denso como el de Monteverde (o quizás por eso, no se) se puede ver bastante vida animal. He visto un chancho de monte (una especie de jabalí), dos roedores del tamaño de un perro pequeño que nunca me acuerdo como se llaman, una especie de oso hormiguero subido a un árbol, varios monos araña y capuchinos, un pizote en la carretera de entrada al parque, una serpiente venenosa pequeña (al salir del parque le he mostrado la foto al guarda y me ha dicho que es un "crótalo cornudo" venenoso y que, de haberme mordido, tendría unas 10 horas para ponerme el antídoto, que no es mortal pero que la zona afectada por la mordedura a veces no recupera la sensibilidad o el movimiento...¡¡con lo pequeña que era la jodía, la mala leche que se gasta!!).
El volcán continuamente esta bramando (parecen truenos pequeñitos) y escupiendo piedras y cenizas, pero solo se ve como caen, no como las expulsa al estar totalmente cubierta la cumbre y no verse. El volcán erupcionó el 29 de julio de 1968 sepultando dos pueblos y causando 79 muertos (con posterioridad ha matado a varios turistas imprudentes que se han saltado los limites de seguridad e intentado escalarlo). En el año 1998 emitió cantidad de lava volcánica (la lava de este volcán no es liquida tipo colada, sino rocas incandescentes de un cierto tamaño). Tiene un cono volcánico casi perfecto con varias bocas. Desde el 98 solo emite fumarolas y rocas que lanza con mucha frecuencia y que se ven, de día, rodar por sus pendientes levantando gran polvareda.
Por la noche me llevan en su coche de alquiler (una parejita de recién casados de Girona que he conocido en el parque) a un mirador desde el que se ve, de noche, esas mismas rocas que de día no se aprecian y que, por la noche, se ven incandescentes de color rojo y amarillo. Aunque el volcán sigue cubierto se aprecian, perfectamente, las coladas que va soltando de tarde en tarde. Al final la lluvia es tan intensa y la niebla tan espesa que no se ve un pijo y tenemos que regresar.
Desde aquí vamos a un balneario de aguas termales (calentadas en la caldera del volcán) llamado Baldi y que tiene montado un tinglado de narices: no se cuantas piscinas con aguas a diferentes temperaturas, desde la de cocer huevos a la fría, con cascadas, toboganes, jacuzzis, bares dentro de las piscinas, etc., etc..
¡¡Hoy ha sido un día explosivo y, como siempre, pasado por agua -Yin y Yang- agua y fuego!!. ¡¡Quien da mas!!.
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