Despues de la tormenta.

16.08.2009:

Hoy ha amanecido un día esplendido después del diluvio de ayer. Como dice el refrán: "después de la tempestad viene la calma".. He leído en la guía de un sendero que sigue el curso del rió Pianista y, aunque no pone nada mas sobre duración o dificultad, voy a patearlo.

La primera parte discurre por una carretera abandonada (el puente sobre el río que la unía a Boquete se desplomo con una riada y no lo han reparado aún) entre magnificas y bellisimas plantaciones de cafetales (todos ordenaditos y en linea, parece que hayan peinado a raya al monte). Antes de salir del pueblo pasas por urbanizaciones de lujo con chalets tipo plantaciones del sur de Virginia (con cafetales en vez de algonales) con sus enormes columnas en el porche (me he quedado mirando a ver si salia Escarlata O`Hara o la criada negra diciendo aquello de: " señorita Escalata srta. Escalata... el señorito Reed esta en el polche").

Esto es debido a que hace algunos años una revista especializada en el segmento de jubilatas llamada "Modern Matuarity" eligió esta zona de Panama como uno de los 4 mejores lugares para retirarse y como estos siempre hacen lo que les dicen... pues se ha llenado de pensionistas yanquis.

El sendero nada tiene que ver con el de ayer, excepto en lo embarrado que esta. Como estaba bastante cansado de lo de ayer en cuanto ha empezado a empinarse el sendero he dado media vuelta, he buscado un remansito del río en sombra, me he dado un bañito reparador y me he puesto a escribir y escuchar música.

Por la tarde me encuentra en Boquete el "papa gnomo" valenciano (él me reconoce a mi, porque yo hubiera sido incapaz de reconocerle a él). Ayer con el pelo y la cara empapados, lleno de barro, etc., no tenia nada que ver con el hombre de hoy: todo él vestido de Quechua (parece un hombre anuncio de Decathlon) con sus pantalones largos desmontables -con 84 bolsillos-, su camisa idem, sus sandalias de trekking, su sombrero de ala ancha, etc. (todo lo que hubiera necesitado ayer en el volcán lo estaba ahora "luciendo" por las calles del pueblo). Le pregunto por la familia y me dice que están aún en la cama (son casi las 5 de la tarde), que sus hijas no se han querido levantar y su mujer no le habla por haberlas embarcado en esa "aventura" que por poco acaba con ellas (me temo que el próximo año... de nuevo a Benidorm).

A ultima hora de la tarde truenos, relámpagos, nubes... ¡tormenta!. ¿Que raro, no?.