10.09.20098:
Hoy ha sido un día extraño. Siempre tengo una agenda o plan a ejecutar en cada lugar que visito y, desde el día anterior, preparo el itinerario si es urbano y si salgo al campo, compro la comida, o miro horarios y rutas si viajo, etc., pero hoy me he levantado sin tener otra meta que pasar el día, sin saber que hacer ni adonde ir (ayer visite las cuatro cosas típicas que hay que ver en Managua) y ni la ciudad se presta a ello ni el calor que hace aconseja el típico deambular sin rumbo fijo que me es tan grato en otros lugares.
Como me acosté pronto (aquí oscurece a las 6:30 y de noche no puedes salir ni hay donde ir) me he despertado también muy temprano y !me he puesto a ver en la tele los noticiarios "nicas" para matar el tiempo!.
El saberme atado a un sitio (por el tema de la cámara de fotos) es algo que en todos estos meses no había experimentado, pues siempre he tirado para donde he querido en el momento en que he querido y aquí, a pesar de ser una nimiedad y solo por dos o tres días, el no sentirme libre del todo me esta incomodando (!!con la de años y años en que he tenido tantas obligaciones, compromisos, etc., y ahora ...por dos días...!!).
Paso la mayor parte del día dando vueltas como un zombi por las cuatro salas del Museo Nacional, muy lentamente y leyendo hasta las instrucciones de uso de los extintores de incendios y los consejos sobre como actuar en caso de un terremoto, pero ... !el tiempo no pasa! (yo si creo en lo de la "relatividad del tiempo", pero no por aquello de la "curvatura espacio temporal gravitatoria" que decía el Einstein -que no se que coño es-, sino porque cuando estas haciendo algo que te gusta o interesa ...!vuela!, y cuando tienes prisa porque pase o te estas aburriendo ... !se para!).
Se me ha hecho eterno el día hasta las 5 en que decidí subir hasta la "loma Tiscapa", único sitio de interés que ayer no visite. Es, sin duda, el mejor sitio de Managua. Sobre todo al atardecer. La ciudad, en las distancias cortas, es bastante feota, pero de lejos es bastante bonita, bueno, lo que se puede ver de ella, pues al ser casi el 100% casas de una sola altura y estar muy arbolada, desde la loma parece un bosque mas que una ciudad. Hay pequeñas aglomeraciones en torno a dos o tres grandes centros comerciales y (los he contado) ocho edificios de mas de tres alturas (uno en construcción). Eso y unos pocos tejados es todo lo que, desde arriba, se aprecia de la ciudad.
A pesar de lo que dije en la entrada de ayer, desde esta loma he lamentado muchísimo no tener a mano la cámara. Desde aquí he visto una de las mejores puestas de sol de mi vida y el arco iris mas perfecto y precioso: los colores morado, verde, amarillo y rojo muy intensos y perfectamente dibujados con los dos extremos del arco, de una curvatura perfecta, como surgiendo desde dos puntos opuestos de la tierra muy, pero que muy distantes.
Desde este promontorio no hay ningún obstáculo y se ven los 360° de la bóveda celeste.
Según el sol se va acostando los colores de los que va tiñendo las nubes va cambiando de rojo, amarillo, dorado, morado, añil, índigo, purpura y, a veces, todos a la vez. Las nubes grandes van proyectando sombras sobre otras opuestas creando unos dibujos, tonos y formas preciosos.
Desde esta atalaya se ve todo Managua y una buena parte de los alrededores: el lago Managua que, desde esta distancia se ve bien aunque esta bastante contaminado y en sus orillas huele mal, la laguna Tiscapa, a los pies de la loma que es un antiguo cráter volcánico inundado de agua de lluvia, el cono perfecto del volcán Momotombo en la lejanía, la cordillera de Apoyeque y sobre todo, un cielo infinito y precioso.
En la cima de la loma estuvo en tiempos la casa del presidente, pero fue derruida dos veces por los terremotos y , en su ultima restauración paso a ser la sede del cuartel general de la infausta Guardia Nacional de Somoza, en cuyos calabozos se torturaba a los prisioneros políticos (hay una exposición en las ruinas del cuartel que pone los pelos de punta titulada: Noches de tortura).
!Al final me han faltado dos horas de luz!...¡la jodida elasticidad esa que actúa como la ley de Murphy!.
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