En la región de Transilvania se sitúan algunas de las ciudades medievales mejor conservadas de Europa, como es el caso de Brasov, con su antigua arquitectura sajona, Sighisoara, con su ciudadela y su torre del reloj del siglo XIV.
Junto a estas ciudades medievales se encuentran varios de los castillos mas famosos de Rumanía (casí todos asociados a la figura de Vlad Tepes "Dracula") como son los de Bran y Rasnov.
Mención aparte merece el tambien cercano Sinaia que guarda los castillos y palacios de la realeza rumana como son los de Peles (una especie de Versalles en miniatura) en plenas montañas Bucegi (por donde nos hemos dado un "rulito" a pesar del cartelito a la entrada del Parque Natural que advierte del peligro de encontrarte osos).
la Fortaleza de Rasnov fue construida en 1300 por los "Caballeros Teutónicos" para proteger Transilvania de los tártaros y los turcos.
Castillo de Bran: "El castillo de Dracula": Se trata de una mansión medieval muy bien conservada, que está a 25 kilómetros al noreste de Brasov, en Bran. Rodeado de un aura de misterio y leyenda en torno al mito de Drácula de Bram Stoker, esta imponente mansión es un lugar de paso obligatorio para los que siguen la Ruta de Drácula por Transilvania.
Construido en lo alto de una roca de 200 metros de altura, el "Castillo de Drácula" (el otro lugar que se situa como el nacimiento de Vlad Tepes, junto con Sighisoara) impresiona por sus torres y torreones. Fue construido en el sitio donde se encontraba una fortaleza de la época de los Caballeros Teutónicos de 1212, y fue documentado por primera vez en una acta que emitió Luis I de Hungría en 1377 en la que concedía a los sajones de Kronstadt (Brasov) el privilegio de construir la Ciudadela. El castillo alberga unas 60 habitaciones a las que se llega a través de sinuosas y estrechas escaleras, y muchas de estas habitaciones están conectadas por pasajes subterráneos en los que hay colecciones de muebles, armas y armaduras de los siglos XIV a XIX
