08-12-2011
Desde el extremo norte de India, en las estribaciones del Himalaya, ya tocaba ir hacia el sur de India para ver la otra parte de este inmenso país que tengo intención de visitar antes de pasar a Sri Lanka.
Después de dos días de viaje llego a Bhopal (una triste ciudad con una triste historia). Bhopal no es nada atractiva pero en sus inmediaciones se encuentra Sanchi, un lugar en donde esta la mayor y mejor stupa budista (especie de tumba en donde yacen los restos de algún santón budista) de la India. En este caso aquí reposan los restos de los primeros discípulos de Buda.
Construida en el siglo III antes de Cristo esta declarada Patrimonio Mundial por la Unesco. Tiene una forma semiesférica, atípica en este tipo de construcciones, y es de un tamaño monumental. Fue durante varios siglos (del III a.c. hasta el VII d.c.) un floreciente complejo de stupas y monasterios. Fundado por el emperador Ashoka (en una especie de arrepentimiento por anteriores atrocidades cometidas antes de convertirse al budismo) paso, pese a su gran tamaño, perdida y olvidada durante varios siglos (su abandono coincidió con el declive del budismo y el auge de otros credos) hasta que en el 1818 fue redescubierta por un general ingles.
Su ubicación en lo alto de un monte en plena campiña rodeada de verde y naturaleza la hace aún mas bella de lo que ya es. Destacan sus cuatro "toranas" (puertas) de entrada a la stupa con unas esculturas de una perfección difícil de imaginar en los albores de este tipo de técnica (las comparan con técnicas de tallado de marfil y madera -materiales mucho mas fáciles de trabajar que la dura piedra- por su maestría técnica).
Una visita maravillosa en un día espectacularmente lúcido y tranquilo. ¡Una gozada!.
El contrapunto... el regreso a Bhopal con sus calles abarrotadas, sucias, contaminadas y de una tristeza general que solo parece ser explicada por el drama que, hace mas 25 años, ocurrió en esta ciudad.
Un aciago 3 de diciembre de 1984 se produjo un escape de 40 toneladas de un gas letal de la planta que, en la mismísima ciudad, tenia (¡¡y sigue teniendo!!) la multinacional USA "Union Carbide". Empujadas por el viento las nubes de veneno sobrevolaron la ciudad sembrando la muerte por doquier. A esto se unió el pánico provocado que, lógicamente, se produjo a continuación causando la muerte por aplastamiento de muchas personas. Entre el pánico, la desorientación y la desinformación hicieron que muchas personas, en su intento de huir del gas, fueran directamente hacia él.
El escape fue una combinación de uso de tecnología no aprobada oficialmente, mantenimiento negligente y unas medidas para ahorrar costes que -de acuerdo con cálculos posteriores- permitían ahorrar ¡¡¡¡unos miseros 70 dolares americanos al día ... MANDA HUEVOS!!!.
Según cifras oficiales hubo 3.828 victimas mortales directas, aunque muchos miles fueron enterrados en secreto en tumbas colectivas. El numero de victimas continuado por causas del envenenamiento supera las 20.000, mientras que otras 500.000 sufrieron y sufren diversas enfermedades (aún en las calles se siguen viendo cantidad de personas con afecciones de piel tipo psoriasis) de todo tipo. Este suceso esta considerado el mayor desastre industrial de la historia (triste record Guinnes).
De los 3.000 millones de dolares que reclamaba el gobierno indio, como compensación por daños y perjuicios, solo ha cobrado 470 millones. Estos sinvergüenzas vendieron su compañía a otra multinacional, también norteamericana, y ahora ninguna de las dos quiere hacerse responsable del tema hasta el punto de que su antiguo director gerente, un norteamericano, Warren Anderson, huyo de India para evitar la justicia y ¡¡aun hoy en día no se ha logrado su extradición viviendo el tio tan feliz en Manhattan disfrutando de una maravillosa jubilación!! (supongo que en compensacion por los "tremendos ahorros" que le reportaron a la compañía su plan de reducción de costes que condujeron al desastre).
Jodidas multinacionales.
Desde el extremo norte de India, en las estribaciones del Himalaya, ya tocaba ir hacia el sur de India para ver la otra parte de este inmenso país que tengo intención de visitar antes de pasar a Sri Lanka.
Después de dos días de viaje llego a Bhopal (una triste ciudad con una triste historia). Bhopal no es nada atractiva pero en sus inmediaciones se encuentra Sanchi, un lugar en donde esta la mayor y mejor stupa budista (especie de tumba en donde yacen los restos de algún santón budista) de la India. En este caso aquí reposan los restos de los primeros discípulos de Buda.
Construida en el siglo III antes de Cristo esta declarada Patrimonio Mundial por la Unesco. Tiene una forma semiesférica, atípica en este tipo de construcciones, y es de un tamaño monumental. Fue durante varios siglos (del III a.c. hasta el VII d.c.) un floreciente complejo de stupas y monasterios. Fundado por el emperador Ashoka (en una especie de arrepentimiento por anteriores atrocidades cometidas antes de convertirse al budismo) paso, pese a su gran tamaño, perdida y olvidada durante varios siglos (su abandono coincidió con el declive del budismo y el auge de otros credos) hasta que en el 1818 fue redescubierta por un general ingles.
Su ubicación en lo alto de un monte en plena campiña rodeada de verde y naturaleza la hace aún mas bella de lo que ya es. Destacan sus cuatro "toranas" (puertas) de entrada a la stupa con unas esculturas de una perfección difícil de imaginar en los albores de este tipo de técnica (las comparan con técnicas de tallado de marfil y madera -materiales mucho mas fáciles de trabajar que la dura piedra- por su maestría técnica).
Una visita maravillosa en un día espectacularmente lúcido y tranquilo. ¡Una gozada!.
El contrapunto... el regreso a Bhopal con sus calles abarrotadas, sucias, contaminadas y de una tristeza general que solo parece ser explicada por el drama que, hace mas 25 años, ocurrió en esta ciudad.
Un aciago 3 de diciembre de 1984 se produjo un escape de 40 toneladas de un gas letal de la planta que, en la mismísima ciudad, tenia (¡¡y sigue teniendo!!) la multinacional USA "Union Carbide". Empujadas por el viento las nubes de veneno sobrevolaron la ciudad sembrando la muerte por doquier. A esto se unió el pánico provocado que, lógicamente, se produjo a continuación causando la muerte por aplastamiento de muchas personas. Entre el pánico, la desorientación y la desinformación hicieron que muchas personas, en su intento de huir del gas, fueran directamente hacia él.
El escape fue una combinación de uso de tecnología no aprobada oficialmente, mantenimiento negligente y unas medidas para ahorrar costes que -de acuerdo con cálculos posteriores- permitían ahorrar ¡¡¡¡unos miseros 70 dolares americanos al día ... MANDA HUEVOS!!!.
Según cifras oficiales hubo 3.828 victimas mortales directas, aunque muchos miles fueron enterrados en secreto en tumbas colectivas. El numero de victimas continuado por causas del envenenamiento supera las 20.000, mientras que otras 500.000 sufrieron y sufren diversas enfermedades (aún en las calles se siguen viendo cantidad de personas con afecciones de piel tipo psoriasis) de todo tipo. Este suceso esta considerado el mayor desastre industrial de la historia (triste record Guinnes).
De los 3.000 millones de dolares que reclamaba el gobierno indio, como compensación por daños y perjuicios, solo ha cobrado 470 millones. Estos sinvergüenzas vendieron su compañía a otra multinacional, también norteamericana, y ahora ninguna de las dos quiere hacerse responsable del tema hasta el punto de que su antiguo director gerente, un norteamericano, Warren Anderson, huyo de India para evitar la justicia y ¡¡aun hoy en día no se ha logrado su extradición viviendo el tio tan feliz en Manhattan disfrutando de una maravillosa jubilación!! (supongo que en compensacion por los "tremendos ahorros" que le reportaron a la compañía su plan de reducción de costes que condujeron al desastre).
Jodidas multinacionales.
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