EL CAMINO POR GALICIA

del 04 al 13.05.2014


A CARIDA  -  RIBADEO:
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Brigitte y Rainer Gaubs son los nombres que hay que consignar hoy en este diario. Esto es debido a que hoy es su aniversario de boda (30 añitos a cuestas) y han tenido la amabilidad de invitarme a cenar junto con el grupito suyo de alemanes (en total son tres parejas: cuatro alemanes y dos austriacos, todos ellos emparejados). Llevamos coincidiendo en los albergues desde hace varios días y tenemos muy buen "rollito".

Hoy han pasado, lógicamente, del albergue y se han alojado en un hotelito muy mono en Ribadeo con un recoleto comedor en donde nos han preparado una estupenda paella de marisco y otras cosillas, amen de no se cuantos litros de albariño y varios orujos que nos han puesto "tan agustito" que hemos terminado cantando (bueno ellos y en alemán, yo, evidentemente, no me sabía la canción aunque supongo que sería el equivalente al famoso "Asturias patria querida" ... pero en alemán).

Ellos se quedaran un par de días en este hotel por lo que no creo que vuelva a verlos. ¡Una pena! pero eso es algo que ocurre con frecuencia en el Camino (otra de las posibles enseñanzas del Camino es esa ... la de aprender a desapegarte y dejar marchar las cosas, los paisajes y las personas).

¡Ojala nos volvamos a encontrar en otro lugar!. ¡Gente guapa!.  


RIBADEO  -  VILANOVA DE LOURENZA:
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Hoy en el Camino ha ocurrido algo que, seguramente, solo pasa en el Camino: llevo días coincidiendo con un chico joven en los albergues, pero la primera vez que intenté comunicarme con él me resultó imposible .. es polaco y solo habla su propio idioma, por lo que, tras un par de mutuas sonrisas, desistimos de intentarlo.

Hoy hemos salido a la par del albergue y -aun sin saberlo- los dos estábamos buscando lo mismo: un bar abierto para poder desayunar. No lo encontramos y nos pusimos en marcha.

Después de un montón de quilometros sin encontrar nada abierto (la etapa de mas de 30 kms no tiene en toda ella ... NADA DE NADA) nos hemos sentado en un banco a la vera de una ermita y, sin decirnos ni "mu", él ha sacado unos caramelos de menta del bolsillo y yo unos pocos pistachos que me quedaban y nos hemos puesto a "desayunar" en silencio (pistachos de primero y de postre caramelos de menta) mientras nos regalábamos mutuas sonrisas de complicidad. Después de "desayunar" nos hemos cargado las mochilas y nos hemos hecho veintitantos quilometros uno al lado en silencio.

¿Donde podría ocurrir esto sino no es en el Camino?.


VILANOVA DE LOURENZA  -  GONTAN/ABADIN:
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Esta etapa se prometía dura y difícil pero a mi no me lo ha parecido. A 8 kms. de Lourenza está Mondoñedo, lugar perfecto para hacer una paradita, tomar café y visitar la catedral (en donde el amable párroco me ha dado las luces -la iglesia estaba muy oscura- para que pudiera apreciar los retablos y capillas y luego me ha pasado a la sacristía para que la viera ¡un cura enrollado!).

Después de Mondoñedo llega una largiiiisima cuesta aunque no muy pronunciada y, un poco mas allá, hay una especie de albergue  "O Bisonte de Maariz" en donde su propietaria Karmela (Zili Katova de nombre artístico y con el que firma sus cuadros -es pintora- aunque es madrileña) tiene un peculiar y alternativo albergue. Me ha invitado a café y hemos estado de "chachara" casi dos horas. Interesantísima mujer ... pero la cuesta sigue estando ahí y me espera. Cuando crees que ya está superada ... ¡llega la cuesta de verdad para darte la puntilla!.

El camino es espectacular con enorme masas boscosas (lamentablemente casi todas de eucaliptos y pinos replantados aunque, por zonas, aún se ven vegetación nativa) y el día perfecto para andar: nuboso y con vientecito. El albergue de Gontán bastante bien.


GONTAN/ABADIN  -  VILALBA:
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La etapa ha transcurrido placidamente. No es especialmente bonita pero tiene su encanto. Sobre todo el cruce del río en varios puntos muy densamente arbolados con variedades autóctonas y un abundante caudal de clarisima agua que discurre con rapidez en algunos puntos y se remansa plácidamente en otros.

El albergue, a pesar de no ser de una orden religiosa, tiene los dormitorios colectivos separados por sexos, cosa que no suele ocurrir y, como consecuencia, en el de los hombres (que somos varias docenas) estamos amontonados y en el de mujeres solo hay dos camas ocupadas.


VILALBA  -  BAAMONDE:
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La de hoy es la etapa más plácida que he hecho hasta ahora. Más que ir andando la he hecho paseando. Esta zona del interior de Lugo a la que llaman "Terra Cha" o "Chaira" es bastante agradable y verdaderamente auténtica, en donde aún encuentras aldeitas de cuatro casas de piedras con montones de leña apilados en sus patios para quemar tanto en invierno, como calefacción, como ahora en sus fogones como combustible. Mientras, en sus cuidados huertitos labrados con mimo, las "mulleres" de la casa cuidan de los animales domésticos.

Por entre sus umbrías sendas van discurriendo claros riachuelos de aguas cristalinas en los que crece una rica vegetación acuática sumergida. ¡¡Y para colmo ... es totalmente llana (el sueño de cualquier peregrino)!!. Si además te acompaña un día como el de hoy, radiante de sol pero fresquito ... que más se puede pedir: una senda que recorrer bajo tus pies y cielo limpio sobre tu cabeza. ¡¡Un lujo!!.


BAAMONDE   -  MIRAZ:
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Hoy ha sido otra etapa corta. No me apetecía hacer los 41 kms que hay hasta Sobrado dos Monxes y la he partido. Un acierto. El albergue de Miraz está regentado por una organización inglesa "Confraternity of Saint James" y, aunque las tres hospitaleras son un tanto raras, el albergue es de una limpieza y pulcritud extrema y las instalaciones perfectas.

Hoy me he despedido de otra pareja simpática, austriacos ellos, que han reservado en una casa rural 10 kms más adelante. Supongo que los volveré a pillar.


MIRAZ  -  SOBRADO DOS MONXES:
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Hoy le digo adiós al Camino del Norte pues mañana la etapa finaliza en Arzúa, ya en las etapas finales del Camino Francés.

En años anteriores este "encuentro" siempre me resultó traumático por pasar del sosiego y la soledad del caminar tu solo por prados, bosques, senderos, etc., y de dormir con apenas media docena de peregrinos (en varias ocasiones he dormido solo en varios albergues), a pasar a caminar en medio de una "riada" de peregrinos y a dormir con "vecinos" arriba, abajo, a los lados, etc.. A tener que esperar turno por las mañanas para ir al baño (con el "apretón" que a veces te da al levantarte) o para poder ducharte al llegar al albergue empapado de sudor.

Afortunadamente desde Arzua quedan poco más de 40 kms para llegar a Santiago de Compostela.

Una vez en el albergue de Sobrado salgo a buscar un camino que me lleve al lago artificial que hay a la entrada del pueblo y, el azar, me lleva a la entrada de un camino que reza: .."camiño bello Celta.." (camino viejo celta) que parece estar invitándome a entrar. La pinta es inmejorable. Dos enormes y viejísimos árboles, cubiertos íntegramente de musgo, parecen hacer guardia a la entrada. Según se interna el sendero en el frondoso bosque la penumbra va adueñándose de él. A poco que te pares o andes en silencio (cosa fácil pues esta tapizado de hojarasca húmeda que amortigua y silencia el ruido de los pasos) los sonidos del bosque se van intensificando y puedes percibir con nitidez: el cantar de las distintas aves, el sonido que hacen al batir las alas, la melodía que produce el aire al pasar por entre las elevadas ramas del arbolado, etc.. La sensación de calma y soledad es absoluta.

Recurrentemente una imagen viene a mi mente: la de este bosque en un día de espesa niebla, tan comunes por estas latitudes y -en un claro del bosque- un aquelarre de "meigas" (que es como por aquí llaman a las brujas) invocando viejos y secretos conjuros, mientras en una gigantesca marmita se van cocinando sapos, murciélagos, arañas, culebras y diferentes hierbas del bosque.

¡Un acojone! pues según reza el dicho gallego: "yo no creo en meigas ... pero haberlas ... haylas!. Haber si en una de estas me las encuentro.

A la vuelta al albergue, tras comentárselo al hospitalero, me comenta que en ese bosque se rodaron muchas de las escenas de la película "El Bosque Encantado". ¡Inmejorable escenario!.


SOBRADO DOS MONXES  -  ARZUA:
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Una vez más se cumplió la tradición y la unión de los caminos (del Norte y Francés) en Arzua mas que unión es "choque". El lento pero continúo fluir de peregrinos por la calle principal de Arzua buscando albergue, los numerosos grupos compartiendo mesa en los restaurantes, los turnos para la ducha en el albergue, los vecinos de cama madrugadores (mayoritariamente franceses) que empiezan a trastear y cuchichear antes de las seis de la mañana (¿adonde leche iran a esa hora?) y a montar las mochilas empaquetando sus cosas en ruidosas bolsas de plástico, etc., etc., etc..

Todo un ritual que me hace recordar cuando yo compartía esas rutinas -años ha-. Lógicamente lo del madrugar ¡ni de coña!.

¡Cosas del Camino!.


ARZUA  -  PEDROUZO:
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Simple, corta, llana y amable etapa, prólogo de la última de mañana para llegar a Santiago. De forma inconsciente parece que el cuerpo lo sabe y se va recreando en el camino, paseando, como si no quisiera llegar.

Recuerdo un verso de Machado que viajando en un tren hablaba de: "lo bonito del viajar y ... el horror de llegar".


PEDROUZO  - SANTIAGO DE COMPOSTELA:
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Aunque ya no despierta en mi esa emoción tan intensa de los primeros Caminos el llegar a Santiago, después de cinco semanas de andadura, siempre es algo especial.

Mirando a los otros peregrinos veo en ellos esa intensa emoción que, a algunos, les hace llorar, reír, gritar, abrazarse a aquellos con los que han compartido camino, cenas, vinos, camas, ampollas, cansancio, etc., etc. y a otros recogerse en profundo silencio ante la majestuosa fachada de la catedral en la plaza del Obradoiro.

Hoy, por primera vez, he visitado la catedral en soledad (supongo que será por la hora 2:00 pm) y me ha llamado poderosamente la atención lo monumental que es (cuando hay tanta gente dentro como en otras ocasiones se produce aquello de que: "los árboles no te dejan ver el bosque"). Algo inaudito como que no haya mas que una persona en la fila para "abrazar" al apóstol o solo una pareja en la cripta del sepulcro.

Recorrerla en silencio y cuasi soledad es algo especial, te puedes parar a observar detalles de los retablos, molduras, pinturas, esculturas, etc. sin el apresuramiento del que espera detrás de ti o el inconveniente del que se para delante tapándote, etc..

Las iglesias y, en especial, las catedrales deberían ser remansos de paz y silencio en donde recogerse (al margen de la confesión del recinto y del que lo visita) o, al menos, eso me parece a mi.

He coincidido en Santiago con Aurelio, mi compañero de tai-chi y amigo de años y su sobrina, Noemi, que han hecho el Camino desde Tui, en la frontera con Portugal, y claro ... nos hemos tomado unos vinos, hemos comido y cenado juntos y, sobre todo, nos hemos reido un rato.

¡¡Excelente Fin de Fiesta!!.  

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